AÑO: 1983
DURACIÓN 113 min.
PAÍS: Estados Unidos
DIRECTOR: Richard Franklin
GUIÓN: Tom Holland
MÚSICA: Jerry Goldsmith
FOTOGRAFÍA:Dean Cundey
REPARTO : Anthony Perkins, Vera Miles, Meg Tilly, Robert Loggia, Dennis Franz, Hugh Gillin, Claudia Bryar, Robert Alan Browne, Ben Hartigan, Lee Garlington, Tim Maier, Jill Carroll, Chris Hendrie, Tom Holland, Michael Lomazow
PRODUCTORA: Universal Pictures
GÉNERO: Terror.
Cuando Alfred Hitchcock decidió filmar Psicosis (1960) concibió este proyecto como una especie de descanso creativo pues acababa de realizar la estupenda y emocionante Intriga Internacional (1959), asi como la incomprendida Vértigo un año atrás, filmes que obtuvieron buenas críticas y significaron una buena inversión de capital para su realización, por tal motivo y como comentaba en la entrada anterior, Psicosis costo aproximadamente un millón de dólares, pues se utilizo el equipo de filmación (tanto humano como material) de la serie televisiva Alfred Hitchcock Presenta con la finalidad de ahorrar dinero, esto sin saber que la pequeña cinta filmada en blanco y negro se convertiría en todo un clásico de la cinematografía.
Empero con todo y que la cinta de Hitchcock cierra de forma bastante correcta todos los arcos argumentales que se planteaban en la obra, fue el carisma del personaje principal el que obligo a lanzar una secuela veinte años después solo para descubrir que había sido de aquel trastornado Norman Bates (Anthony Perkins). Y es precisamente el argumento del cual trata esta continuación que dirige un televisivo Richard Franklin, trabajo que guardando las enormes distancias con el de Hitchcock, resulta pasable, haciendo de esta cinta una secuela que se deja ver.
La cinta abre con una especie de introducción donde se utiliza material del film original, para ser más preciso el de la escena de la bañera donde Marion Crane (Janeth Leight) sucumbe apuñalada ante el alter ego de Bates (Perkins), esto con el fin de contextualizar al presente que no haya visto el film original (aunque usted no lo crea todavía los hay) sobre lo que vamos a ver.
Posteriormente otra escena (ya a color) nos sumerge en una sala donde un juez evalúa la posibilidad de dejar en libertad a Norman Bates (Perkins), puesto que los argumentos que presentan la fiscalia y el doctor Raymond (Robert Loggia) indican que tras dos décadas de encierro Bates ha sido regenerado en su conducta y por ende no representa ya un peligro para la sociedad.
Sin embargo en la misma audiencia se encuentra la hermana de Marion, una mujer llamada Lila (Vera Miles) la cual no se encuentra de acuerdo con la decisión del juez y exige que no se libere a Norman (el cual por cierto luce bastante taciturno) pues considera que esta decisión no hace justicia a las víctimas por los atroces asesinatos cometidos por este último, desgraciadamente para la mujer Norman (Perkins) es puesto en libertad y este regresa a su antiguo pueblo, en donde el doctor Raymond le ha conseguido un trabajo en una cafeteria para que este se pueda reinsertar a la sociedad.
Ya reinstalado en su antiguo hogar, Norman se encuentra con que su motel se ha convertido en un burdel todo gracias a que el encargado (Dennis Franz) que maneja el mismo ahora renta los cuartos para que jovenzuelos solo vayan a drogarse a ese lugar, además de que este también vende la tan anhelada hierba verde. Es por esto que Bates se encabrona y decide correr al tipo sin saber que este se volverá en su contra por puro coraje.
Por otra parte, Norman conoce a una adorable chica llamada Mary (Meg Tilly) en su primer día de trabajo en la Lonchería, la cual siempre se mete en problemas con el dueño del lugar por ser muy distraída. Lo que sigue después es presenciar como Norman comienza a sentir cierta atracción por la mujer por lo que este empieza a cuestionarse si sus ansias de matar regresaran, ya que cada vez que convive con la chica los recuerdos de antaño rondan la cabeza de Norman.
Y si a esto le añadimos que el hombre comienza a recibir extrañas llamadas en su casa y recados de que se trata de su madre, pues la integridad mental de este comienza a desquebrajarse, sin embargo las cosas se pondrán más difíciles para Bates cuando extraños asesinatos con el mismo móvil de hace veinte años comiencen a suceder en el poblado y estos hagan parecer a este como el principal sospechoso.
Básicamente este sería el argumento de esta secuela la cual no esta del todo mal, sobre todo gracias al buen planteamiento de un guión que firma el propio Tom Holland quien dos años más tarde debutaría como director en la mítica Fright Night (1985), y es que la tesis del film que dirige de manera más que correcta Franklin, es el de probar si Norman Bates verdaderamente se ha regenerado o en realidad sigue siendo un lobo con piel de oveja.
Y es que hay que decir que el guión se percibe trabajadito pues este recurre a varios giros argumentales si no muy originales si bastante efectivos, lo que hace que el film se impregne de grandes dosis de intriga puesto que conforme avanza la trama, los hechos apuntan a que Bates es el culpable de los asesinatos cometidos desde su regreso, empero también aparecen situaciones que hacen que el espectador dude de la culpabilidad del protagonista cuando se puede percibir a un Norman bastante confundido por los eventos que estan ocurriendo.
Por otra parte es importante decir que Psicosisi II guarda algunos paralelismos plásticos y argumentales con la original (omitiendo obviamente que ésta esta filmada a colores) pues apuesta por una narración solvente, aunque se agradece que tenga algunos toques de gore, pues las tres o cuatro escenas donde las víctimas perecen a manos del asesino estan bañadas de ese estilo que hace tan particular a los slashers de la epoca. Es por esto que visualmente el film de Richard Franklin es prueba fehaciente de un tiempo muy preciso como fueron los ochentas (encuadres, paleta cromática en la fotografía, movimientos de cámara, incluso la musicalización, etc.)
Asi mismo se vuelve a reafirmar el discurso eterno de las cintas de destazamineto, “si alguna vez cometes alguna falta moral, tarde o temprano esa fuerza siniestra encarnada en el asesino misterioso te hará pagar por tus pecados”. Ahora bien es importante decir que los actores estan muy correctos en sus roles, sobresaliendo de nuevo un avejentado Anthony Perkins, el cual logra darle más profundidad a su personaje en esta nueva etapa de víctima, además de que siempre mantiene a su Norman Bates en un estado de misterio.
De Vera Miles y Meg Tilly puedo comentar que la primera cumple en su papel de la hermana que busca venganza y hará todo lo posible para que Norman Bates pague por sus crímenes, aunque esto signifique violar la propia ley. Por otra parte Meg Tilly encara su performance de manera un tanto irregular pues ésta no logra matizar de manera clara sus motivaciones, motivo por el cual en ocasiones puede resultar un tanto insoportable y el resto del reparto cumple a la altura en sus pequeños papeles.
Asi que puedo recomendar Psicosis II como una correcta secuela pues con todo y que cuenta con algunos fallos menores o mejor dicho trampitas en el guión (como es la de descubrir la verdadera identidad de Lila y Mary Loomis, o el supuesto arrepentimiento de una de las mujeres por seguir adelante con el plan de acabar con Norman), hay que decir que la evaluación del film es superior, y aspectos como el buen manejo de suspense o esa sorpresa final que develan al verdadero asesino son más que suficientes para exhortar al respetable a revisar esta cinta que de nueva cuenta explora a uno de los villanos más emblemáticos del séptimo arte.
Asi mismo se vuelve a reafirmar el discurso eterno de las cintas de destazamineto, “si alguna vez cometes alguna falta moral, tarde o temprano esa fuerza siniestra encarnada en el asesino misterioso te hará pagar por tus pecados”. Ahora bien es importante decir que los actores estan muy correctos en sus roles, sobresaliendo de nuevo un avejentado Anthony Perkins, el cual logra darle más profundidad a su personaje en esta nueva etapa de víctima, además de que siempre mantiene a su Norman Bates en un estado de misterio.
De Vera Miles y Meg Tilly puedo comentar que la primera cumple en su papel de la hermana que busca venganza y hará todo lo posible para que Norman Bates pague por sus crímenes, aunque esto signifique violar la propia ley. Por otra parte Meg Tilly encara su performance de manera un tanto irregular pues ésta no logra matizar de manera clara sus motivaciones, motivo por el cual en ocasiones puede resultar un tanto insoportable y el resto del reparto cumple a la altura en sus pequeños papeles.
Asi que puedo recomendar Psicosis II como una correcta secuela pues con todo y que cuenta con algunos fallos menores o mejor dicho trampitas en el guión (como es la de descubrir la verdadera identidad de Lila y Mary Loomis, o el supuesto arrepentimiento de una de las mujeres por seguir adelante con el plan de acabar con Norman), hay que decir que la evaluación del film es superior, y aspectos como el buen manejo de suspense o esa sorpresa final que develan al verdadero asesino son más que suficientes para exhortar al respetable a revisar esta cinta que de nueva cuenta explora a uno de los villanos más emblemáticos del séptimo arte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario